Guillermo Nieto nos cuenta en su Miércoles literarios, una broma de "Licho" y el "Nono"

Edgar Macías y Jaime Antonio Echeverría Arteta (QPD.). Dos personajes muy queridos por su pueblo Juan De Acosta.

Preguntar por Edgar Macías, se hace difícil, nadie lo distingue, es desgastante encontrarlo. Cuando preguntas por "Licho" todo el mundo lo identifica, desde los ancianos hasta los niños.

De igual forma sucedió siempre con Jaime Antonio Echeverría Arteta. (Qpd).

Fue Alcalde de Juan de Acosta y lider político, hombre franco y de un humor original. Preguntar por Jaime Antonio Echeverría Arteta, es preguntar por un extraño. Totalmente distinto cuando preguntas por el "Nono Echeverria",el indagado esboza una sonrisa amplia y afloran sus gracias y bromas de los recuerdos .

"Licho" y "el Nono" estudiaron en la Escuela Normal, época de oro de esa institución que recibía a inquietos estudiante de los municipios vecinos a la Ciudad de Barranquilla.

Época también que el transporte y los medios de comunicación eran muy escasos. Se enviaban recados por la emisora local radio libertad. El Nono y Licho amigos inseparables del pueblo ahora socios de estudios en la Normal de Varones, perfeccionaban sus bromas. Al primer descuido de sus compañeros en los comedores de la normal, les cambiaban el almuerzo por un cargado plato de arena negra de capa vegetal.

"Los socios" viajaban a Juan de Acosta cada mes y aprovechaban el bus de Tranquilino Molina, para enviar la ropa sucia en talegos de lienzo de rayas azules ;para que los lavaran y regresaran planchados con rigurosa plancha de carbón de la época . Junto a la ropa doblada y planchada regresaban bolsas de maniguetas , amplias y fuertes cargadas de quesos, mantequilla y bollos de mazorca millo bollos limpios. También carne fresca y cerdo magro.

"El Nono y Licho" antes de llegar a las residencias donde pernoctaban con sus familiares en Barranquilla, vendían parte de la encomienda, y ahorraban el dinero para cuando regresarán a Juan de Acosta tomarse varias botellas de Ron Blanco. El inconveniente era para ese entonces los aguerridos gorreros que disfrutaban de sus ahorros sin colocar un peso para el trago.

-- Este fin de mes cuando estemos en el pueblo gorrero que venga a pegarse del ron lo ignoramos,-- dijo "el nono"

"Licho" sonriente aceptó la propuesta.

El fin de mes llegó y los muchachos se citaron en los billares de "pajarito "el billar ubicado frente a la plaza , diagonal a la Iglesia de san juan Bautista . Habían comprado una botella de Ron Blanco y jugaban un partido de buchacara cuando el nono interrumpió a " Licho"

-- Macías ! Mira quien viene Martín yuca asá vamos a ignorarlo cuidao le brindan trago --dijo señalando a Mateo Higgins que servía de la botella.

Martín yuca asá venía en un burro grande y flojo atravesando la plaza. Se bajó con el gancho en la mano y saludo a los jóvenes estudiantes. Deseoso de involucrarse en el juego y la parranda, Martín yuca asa, le decía a "Licho "

-- Ponle el efecto contrario, mira que el quince esta vendido, cuidado te caes. --

Licho no lo miraba, …

Licho y el Nono se abrazaron en la puerta del billar mirando hacia Tubará, venía una tempestad de nubes oscuras. El Nono abrazó a Licho y le dijo.

-- Yoouurdss Macías mira ese mundo de lluvia que viene del lado de Piojó que tempestad tan grande!!

Mateo volvió a servir e ignoro nuevamente a Martín yuca asa.

Martin se levantó se ajustó el cuello de la camisa agarrándose las dos puntas .

Con ambas manos, apretó el gancho de guayacán que utilizaba para puyar el burro, y dijo con una profunda ironía:

-- par de mequetrefes, los paes los mandan a estudiar a Barranquilla, y no saben donde están parados ni pa donde queda Piojó --

Se montó y puyó el burro me largo de aquí

-- Ni males duros no brindan un trago, - -- exclamó.

Al alejarse unos metros el Nono riéndose dijo:

- - Ya cayó el primero, lleva la cuenta Mateo jajaja..--

Guillermo Nieto Molina

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