El alcalde Char pide no arrojar basura a los arroyos pero la falta de cultura ciudadana parece haber nacido con la propia ciudad de Barranquilla
Nota escrita en el 2018
Canalización del arroyo de la carrera 20 con calle 38, llena de basura. Hansel Vásquez. Esta foto fue tomada el 15 de mayo de 2018 - 00:17, pero todo sigue igual. En 1905 y en 2019
Parece escrito hoy, pero fue publicado y divulgado por el semanario católico El Estandarte, del Presbítero Pedro María Revollo, el 4 de junio de 1905, resaltando la falta de civismo y poca cultura ciudadana d el barranquilllero y la necesidades que había de disciplinarlos, mediante la elaboración de algunas medidas. Aquí el texto de esa nota editorial::
1-) La organización perfecta de un Cuerpo de Policía, suficiente para vigilar de día y de noche los barrios de los ricos y los pobres, el orden y la tranquilidad del territorio, el respeto de las propiedades y el bienestar de las personas.
2-) El fenómeno metódico y sólido de la instrucción pública, problema social que criminalmente abandonaron en esta ciudad más que en ninguna otra parte del país, de tal modo que no es de exagerar decir que la juventud no tiene mayores esperanzas
3-) El progreso material de la ciudad. Barranquilla es, en efecto, un pueblo grande. Tenemos ferrocarril, buques a vapor para la navegación, fábricas, teatros, circo de toros...Pero no tenemos calles aseadas, ni caminos medianamente aseados, ni cementerio aseado. Todo esto marcha aquí en nuestra tierra en el mejor desgreño. La Junta de Fomento compone algunas calles hoy, para que los vecinos tengan el gusto de descomponerlas mañana. Los basureros de almacenes, tiendas y casas de habitación, van a dar siempre al basurero público, que aquí son las calles. Los huesos y cáscaras de las frutas; las escamas y espinas de los pescados; los botines y zapatos viejos y objetos sobrantes de las cosas van al muladar público, o sea a las calles de la ciudad. Nada más natural que esperar los celos de nuestras autoridades, ahora que vamos a entrar en una vida nueva, el mayor tesón para destruir de la población todas estas costumbres feas que tanto desdicen de la educación de sus habitantes. Hoy, cuando Barranquilla entra en una nueva era, sus ciudadanos siguen lanzando todo tipo de basuras a las calles, semillas y cáscaras de fruta, zapatos viejos, botellas vacías, vasos de plástico y todos los sobrantes de las cosas, van a parar a las calles.
¿Qué diferencia hay entre el comportamiento de esos ciudadanos de 1905 y los de hoy? Ustedes decidan. Miren este editorial de Diario La Libertad el 10 de diciembre de 2017 a las 6 de la mañana
-Por ejemplo, un ciudadano comprometido con su ciudad no bota la basura a la calle, sin embargo en algunos sectores de Barranquilla es una práctica común y corriente desprenderse sin ningún escrúpulo de toda clase de desechos, lo que hace parecer insuficiente la esforzada actividad que desarrollan los operarios que prestan su servicio en la empresa encargada de cumplir con eficiencia las labores de aseo en nuestra urbe.
Esa criticable costumbre, además de ser desagradable a los ojos de propios y extraños, atenta contra el sistema ambiental y es en las temporadas de lluvias cuando más se evidencia esta grave situación, época en la cual es normal que los habitantes de algunos barrios aprovechan las corrientes de los arroyos para arrojar a ellos todo lo que ya no les sirve. Este es un aspecto que poco suele importarle a muchos miembros de la comunidad barranquillera cuyo grado de civilidad ni siquiera les alcanza para preocuparse por cuidar su propio entorno- indica la publicación.
Alcalde de Barranquilla Alejandro Char.
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¿Otro más? 27 de septiembre 2017 , 04:53 a.m. Diario El Tiempo –Nuevamente quedó en evidencia la falta de civismo y responsabilidad ciudadana de parte de los habitantes del norte de Barranquilla. La lluvia que cayó este martes, poco después del mediodía en el sector, trajo, una vez más, basura que, en pocos minutos, taponaron las rejillas de la canalización del arroyo de la calle 84. En la esquina de la 84 con la carrera 51, justo donde comienza la canalización, el arroyo se desbordó debido a ese taponamiento. Bolsas de basura, canecas y diferentes residuos sólidos evitaron que el agua ingresara a las rejillas y siguiera por las obras ya canalizadas. ¿Tiene algo de raro entonces que los asistentes a los escenarios deportivos, suban “las patas” -como dijo el columnista de una diario local- al respaldo de los asientos que tiene enfrente. Mano dura. Un Cuerpo de Policía sólido, para imponer las normas disciplinarias que los barranquilleros jamás aprendimos ¿
Aqui todo lo q dice el alcalde Char pareciera ser palabra de Dios,y nadie se pregunta,porquè unas obras recien terminadas,tienen la debilidad y la vulnerabilidad demostrada cuando verdaderamente lo q se necesita es q demuestren calidad y fortaleza en sus diseños.Sì estamos falta de cultura ciudadana,pero las obras dejan mucho q desear,con los recientes aguacero caidos recientemente,se ha descubierto la falta de planeacion y el diseño,se ha demostrado q son obras hechas a la carreta a pesar q pa los sures las obras avanzan a paso de caracol.Hay una vida perdida a causa de esto.El viejo y trillado tema del alcalde y su antecesora Elsita de non granta recordacion para este servidor,de los arrollos ya eran parte del pasado…